Retrocedamos en el tiempo, al siglo XVII, al reinado de Felipe IV, donde el nomadismo de propios y extraños llevaba a vivir la vida libre y andariega, de aventuras, miserias, enredos, artificios, hurtos y trapacerías, a través de caminos, ventas y posadas. Volvamos a llenar el espacio de caballeros, nobles damas, labradores, sacamuelas, lazarillos, venteros, mesoneras y aguadores, soldados y salteadores de caminos, sastres y escribanos, nobles y villanos…

III  JORNADA CAMINO REAL DE LA PLATA

ADAMUZ, 5 DE JULIO DEL 2014

Regresemos a otras lunas llenas. Retrocedamos en el tiempo, al siglo XVII, al reinado de Felipe IV, donde el nomadismo de propios y extraños llevaba a vivir la vida libre y andariega, de aventuras, miserias, enredos, artificios, hurtos y trapacerías, a través de caminos, ventas y posadas. Volvamos a llenar el espacio de caballeros, nobles damas, labradores, sacamuelas, lazarillos, venteros, mesoneras y aguadores, soldados y salteadores de caminos, sastres y escribanos, nobles y villanos…

Adamuz, era  entonces, villa, perteneciente a la Casa del Marquesado del Carpio. Poblada sus calles de Mesones y alojamientos para el reposo y el descanso, para caminantes en su paso de Córdoba a Toledo; habitada por cristianos, judíos y moriscos. Mezcolanza de sangres y culturas que pululaban roturando la sierra, y dando lugar a la siembra de mucho olivar del que hoy llena nuestro término y nuestros paisajes.

Volvamos, por una jornada,  al tiempo de esplendor del Camino Real de la Plata, que dio vida, colorido e historia a este pueblo cuya cortesía y generosidad va dejando huella en los tiempos

(Durante los días 3, y 4,  exposiciones, rutas guiadas, música, bailes, teatro, etc)

 D.G.M. /T.C.