Casas Señoriales

Abundan, sin embargo, las casas con portada labrada en piedra cuyo dintel presenta a veces fechas, inscripciones o símbolos religiosos, que a falta de blasones, satisfacen de algún modo el afán de notoriedad de sus propietarios, sin descartar el que alguna de estas casas tuviera como origen alguna dedicación de carácter religioso. La de caracteres de mayor antigüedad es la número 30 de la calle Mesones, su ancho dintel tiene decoración y letras de tipo gótico entre las que destacan el año 1510.

El tipo frecuente en el XVI es de portada no muy alta, con alto dintel, enmarcada por una moldura o simple faja, a modo de arrabá, que baja por los lados a la altura del dintel. En el centro, una cruz en relieve florenzada o flordelisada y siempre con pretensión artística. Las jambas lisas de piedra. Inmediatamente encima del dintel se abre una ventana con reja casi siempre saliente y que llega justamente hasta el alero del tejado. En el resto de la fachada se abren pocos huecos, todos ellos en forma de ventana. Deben señalarse las casas números 40 y 50 de la calle Mesones, ésta última fechada en 1525, y la núm. 6 de la calle Dueñas, fechada en 1570, con la curiosa inscripción siguiente: “Al que mucho vieres parlar non fagas caso del ni le des crédito alguno”. Ya en el XVII, se suprimen al parecer los símbolos en inscripciones, así como el arrabá y aparece sobre el dintel un frontón partido, bien moldurado, que alberga la ventana. El piso superior suele ser ya algo más alto. Sobre los lados del frontón, unos pináculos piramidales, en algún caso rematados con bola.En el XVIII, aparece algún balcón en lugar de la ventana sobre la puerta. Son dignas de destacarse las casas num. 9 y 10 de la callede la Cárcel, 1 y 69 de la calle Mesones, 7 de la calle la Fuente, 20 de la calle Juncal, 3 y 13 de la Plaza de la Constitución.